miércoles, enero 28, 2009

TIENES ALGUNA RAZON PARA DAR LAS GRACIAS??

A los tiempos que escribo en mi blog, he estado "ocupado".

Pero más vale tarde que nunca.

Y quisiera retomar mi actividad bloggera recordando lo que ha sido el año 2008, y más que nada la reflexión que hice al finalizar el año, esperando los últimos minutos para la llegada del 2009.

El 2008 fue para mi y mi familia un año realmente bueno en muchos aspectos. 

El trabajo mío y el de mi esposa han tenido un excelente caminar, con muy buenos resultados y proyecciones.

Hemos podido empezar la construcción de nuestra casa, tal como la soñé y la pedí a Dios en reiteradas ocasiones: en un suburbio pero no muy lejos del centro, sin smog, con patio y áreas verdes, en un lugar muy seguro, con el espacio suficiente para poder estar cómodos, con un rico clima, no tan frío como en Quito.... en fin, tal como lo soñé.

Nuestro hijo ha crecido mucho, es un niño bastante alto para sus cortos 2 años, muy fuerte y sano. En los últimos meses presentó un problema de alergias, pero parece que está controlado gracias a un medicamento natural made in Ecuador.

Mi familia super bien.. mis hermanos muy bien en sus trabajos, mi padre mejor con su salud y con algunos proyectos profesionales.

Lo que si he descuidado es mi relación con Dios... a ver.. no es la relación sino que no he sido un miembro valioso de mi Iglesia. No he asistido a la congregación con la frecuencia que debería, no he continuado con mi estudio Bíblico, y si bien hablo mucho de Dios a la gente que me rodea, no he logrado formar un grupo de oración, ni siquiera una persona a quien poder transmitir lo que he aprendido sobre Dios y Jesucristo.

En resumen un buen año... al menos en ciertos aspectos.

Pero les cuento que por otro lado, conocí una muchacha de 26 años, a quien contratamos en nuestro trabajo como asistente para varios proyectos en marcha. En sus primeros días mostró una excelente predisposición al trabajo, gran proactividad, mucha entrega y profesionalismo, tanto que a ratos nos impactaba con su fuerza y personalidad, pero siempre hacía todo con gran corazón y buena fe.

Un buen día presentó muchos dolores en su torax, hasta que una mañana no llegó a trabajar. Fue al médico y luego de varios exámenes resulto que tiene cancer, lamentablemente en estado terminal. Del hospital especializado en este tipo de males, le enviaron a casa con fuertes dosis de medicamentos para el dolor y oxígeno... ya no había nada que hacer.

Apenas había pasado algo más de 1 mes desde que inició su trabajo con nosotros, y ahora estaba en cama, totalmente imposibilitada de moverse o hablar, simplemente esperando la muerte.

Que shock emocional que ha sido para todos los que trabajamos juntos.

Que terrible ver como una niña de 26 años, con toda la vida por delante, con todas las ganas de vivir y llena de sueños para su futuro, tenga que pasar por esto.

Y al mismo tiempo... 

Que cerca que puede estar la enfermedad y la muerte de nosotros.... pero a la vez que lejos que está de los más cercanos a nosotros, al menos por ahora.

Este terrible tema sin duda me ha llevado a pensar en que nuestra realidad, nuestra vida, con todos los problemas que tenemos, con mi problema vascular en mis piernas, mis alergias en mi piel, entre otros muchos temas, es realmente una bendición.

Tenemos taaaaantas razones para darle gracias a Dios, tooooodos los días de nuestra vida, pero lamentablemente solemos darlas por hecho, y no tenemos la capacidad espiritual ni la sencillez de corazón para darnos cuenta de cómo Dios actúa en todos los aspectos de nuestra vida.

Oh Señor mío, Oh Padre del Cielo, muchas gracias por todo (TODO) lo que tu me haz dado, gracias por lo que no me haz dado, gracias por mi familia, mi esposa, mi hijo. Gracias por tu amor infinito, tu misericordia permanente, y por todos tus regalos y bendiciones.

Gracias por estar en mi vida, siempre.

James

PD. La niña de la historia aún sigue con vida, parece que reacciona positivamente a un tratamiento natural. Al menos los dolores han disminuido, se siente mejor, y con la ayuda de Dios podrá estar con nosotros un poco más de tiempo.